El ya no sube al techo para mirar las estrellas, y las conectaba entre ellas para acordase de mí, el ya no llama por la noches para saber si todavía respiro, sin saber que en cada suspiro, todavía lo siento en mi, el ya no camina con ese caminar pausado, haciendo creer a todo el mundo que no era para mi, el ya no baila con migo esa pieza inolvidable, la cual todavía escucho y me hace pensar en el, el ya no manda mensajes diciendo que le devuelva, ya que lamentablemente el no esta aquí, el no canta para mi, y nunca había cantado, pero mi corazón lo quería tanto que me hizo créelo así. el no escribe rimas para mi, aquellas tan estúpidas que me hacían reír, el no llega hasta mi casa en medio del aguacero, solo para darme un pétalo, ya que de la rosa no había mas, el no deja flores en mi puerta los 14 de febrero, lo que hacia que la vecina siempre me mirara mal, el no se pone en la ventana, ni me pita desde ella, y solo queda una cortina, rota, sucia y vieja, ondeando de sol a sol, recordándome que lamentablemente, este también se ha ido. El ya no me presta su abrigo los días que hace frió, ni me compra esas paletas que tanto me han de gustar, el ya no me acompaña en las largas caminatas entre un destino y otro, haciéndome reír en cada paso que daba, haciéndome desear que esto siguiera así.
Creo que el ya nunca estará aquí, y creo que es mejor así, la vida continua, el viene, el va, el dique se queda, pero yo se que nunca se quedará, a veces quiero que se valla otras veces no, pero lo que si se, es que el siempre estará en mi recuerdo.
Creo que el ya nunca estará aquí, y creo que es mejor así, la vida continua, el viene, el va, el dique se queda, pero yo se que nunca se quedará, a veces quiero que se valla otras veces no, pero lo que si se, es que el siempre estará en mi recuerdo.